En un pequeño taller de Buenos Aires, en la década de los 80, un grupo de artesanos, comenzaron con la elaboración de productos originarios argentinos en materia de talabartería, dando nacimiento a La Curtiembre.
Se decidió dejar de lado la masificación de productos en cadena para inclinarse en lo exclusivo y artesanal, manufacturan artículos de cuero con los más finos diseños y materiales. Desde hace más de 30 años, la misión es elaborar productos argentinos, confeccionados en forma artesanal con alta calidad en cueros y excelente terminación.